El 20 de Abril de 2018 fue lanzado al mercado un videojuego simplemente conocido como God of War. Este fue un título muy anticipado en su momento, ya que marcaba el retorno de la épica franquicia de Kratos, solo que esta vez tomaría lugar en la mitología nórdica y tendría un estilo de gameplay completamente diferente ¿El resultado? Una experiencia increíble que le dio nueva vida a esta gran franquicia. Hoy celebramos su sexto aniversario.
Hoy recordamos a God of War (2018) con mucho cariño
God of War es una popular franquicia de videojuegos del género hack & slash que comenzó su vida en la PlayStation 2. La violenta y trágica historia de Kratos en su misión por eliminar a todos los dioses de Grecia fue contada a lo largo de varias entregas, y llegó a su fin en 2010, con la salida de GOW3. Luego del lanzamiento de la precuela Ascension en 2013, la franquicia no tuvo ninguna entrega nueva por mucho tiempo. Después de todo, la historia de Kratos estaba completa, así que no había nada más que contar ¿O no?
Eso pensábamos todos hasta que Kratos reapareció en nuestras pantallas en la presentación de Sony durante la E3 2016, cuando fue revelado este videojuego que sería lanzado dos años más tarde para la PlayStation 4. Aunque su título es solo God of War, esta es en realidad la cuarta entrega principal de la franquicia, pero también funcionó como un reboot que cambió absolutamente todo, tanto la narrativa como el gameplay. Tal y como se había insinuado, Kratos sobrevivió su pelea contra el panteón griego y se mudó a la antigua Escandinavia. Allí, conoció a una mujer llamada Faye y tuvo un hijo llamado Atreus.
Cuando Faye fallece, Kratos y Atreus deberán llevar sus cenizas al punto más alto de Midgard, en una aventura que los obligará a fortalecer sus lazos, aunque también deberán enfrentar a algunos problemáticos dioses nórdicos en el camino. Esta es una increíble historia con un fuerte núcleo emocional centrado en la relación padre e hijo de los dos protagonistas. Kratos siempre fue criticado por ser un personaje brusco y unidimensional en los títulos anteriores, pero esta nueva entrega fue la oportunidad perfecta para desarrollarlo y explorar distintos aspectos de su personalidad.
La idea de trasladar la historia de God of War de Grecia a Escandinavia para pasar de la mitología griega a la nórdica fue una idea ingeniosa que rindió frutos. Los dioses nórdicos que aparecen en esta aventura son oponentes detestables, los nuevos enemigos son intimidantes y el mundo es realmente interesante y lleno de lore fascinante.
Otro cambio drástico de God of War (2018) fue en su sistema de combate, el cual ahora pasó a ser un poco más lento y complejo, pero manteniendo el mismo nivel de violencia desenfrenada. La cámara pasó a estar cerca de Kratos, lo que la hace sentir como una experiencia personal, y el Hacha del Leviatán es un arma muy divertida y satisfactoria de usar. Aunque claro, no podemos olvidar el épico momento en el que Kratos comienza a usar clásicas sus Espadas del Caos otra vez.
Todos estos elementos se combinaron a la perfección para crear una aventura épica e inolvidable que le encantó a los jugadores. God of War fue un éxito de críticas y de ventas: Fue considerado uno de los mejores videojuegos de todo 2018 y vendió más de 3 millones de unidades. Esto revitalizó a la franquicia, lo que llevó a una versión de PC, la aprobación de una serie en Live Action para Amazon Prime Video que adaptará esta historia y la salida de su secuela, God of War Ragnarok, la cual es aún mejor en casi todos los aspectos.
Así que, en el día de su aniversario, no podemos evitar tenerle muchísimo aprecio a este gran videojuego que contó una hermosa historia y revitalizó a toda una franquicia. Ahora, dinos tu opinión: ¿Qué te pareció God of War 4 a ti?